La Graciosa es una isla perfecta para aquellos que buscan unas vacaciones tranquilas y en contacto con la naturaleza. La Graciosa no cuenta con carreteras asfaltadas, por lo que tendrás que adaptarte a su esencia natural. Por ello, el alquiler de un coche no es una opción en esta isla.
Se puede recorrer, a pie o en bici, una red de increíbles senderos, aunque también es posible recorrerla en taxis jeep.
En el mar se realizan apasionantes inmersiones para todos los niveles, en unos fondos marinos que son una delicia. O bien, hacer una excursión marítima en los imponentes barcos que ofrecen las empresas especializadas que hay en el pueblo.
Y si lo que se buscan son las emociones fuertes, en muchos lugares de la isla se puede practicar bodyboard, surf, windsurf y kitesurf gracias a unas olas y un viento de primera calidad.
Para comer cualquier lugar es bueno, y la especialidad que nunca falla es el pescado y el marisco fresco.
El Camping El Salao, en la isla de La Graciosa, con capacidad para unas 500 personas. Hay que pedir permisos para acampar.
Una magnífica alternativa para conocer La Graciosa y sus exóticos paisajes, es subirse a una bicicleta.
La Graciosa dispone de unos senderos diseñadas para disfrutar de todo el esplendor de su paisaje.
Se pueden realizar multitud de excursiones por el Archipiélago Chinijo saliendo desde La Graciosa.
Una magnífica alternativa para conocer La Graciosa y sus exóticos paisajes, es alquilar una jeep y recorrer la isla.
Uno de los factores determinantes de la buena pesca en esta zona es la temperatura de las aguas, así como el clima.